Lo último que supimos de este dúo canadiense, formado por el músico y productor Ethan Kath y la vocalista trash con mucha onda Alice Glass, era que estaban preparando su cuarto álbum; sin embargo el día de ayer (miércoles 8) toda la juventud tuvo su sonrisa borrada cuando comenzó a hacer eco en las redes sociales lo que Glass publicó en su Twitter y Facebook:
“Dejo Crystal Castles. Mi arte y expresión en todas las formas siempre ha sido un intento de sinceridad, honestidad y empatía hacia los demás. Por múltiples razones, tanto profesionales como personales, ya no siento que esto sea posible en CC. Aunque éste es el final de la banda, espero que mis fans me apoyen como solista, del mismo modo en que lo hicieron con Crystal Castles”.
La mayoría de los comentarios lamentaban el fin de esta banda que tuvo gran influencia en la música, tanto de manera directa como en por ejemplo el estilo de Mr. Kitty, o inspirando a otros con su manera experimental de hacer música, con la constante de transformar la voz de Alice Glass para hacerla robotizada, y ese estilo perfectamente reconocible. Algunos más lamentaban no haber ido a verlos en sus visitas que hicieron a México, y aunque se hacían esperar demasiado, cancelaban, y tocaban aproximadamente una hora, verlos era llenarse de la energía esquizofrénica de Alice, que brincaba, se aventaba a los fans, se ahorcaba con los cables, se tiraba, fumaba lo que le rolara el público; y bailar con la música de Ethan Kath, con una energía más mortuoria, pero igualmente con mucha personalidad.
La banda tuvo una duración de apenas 3 LP's de synth pop experimental editados: Crystal Castles (2008), Crystal Castles II (2010) y Crystal Castles III (2012); pero ello les bastó para conectar su rebeldía, catarsis, distopía y agresión con toda una generación.
Sus sonidos de Nintendo gothic electro-pop aceptaban múltiples adjetivos e igualmente se adaptaban a la mutabilidad de nuestro estado de ánimo por medio de los audífonos.
Alice Glass promete volver con un proyecto como solista, pero lo que sentimos con eso es como cuando a manera de consuelo nos dicen "todo va a estar bien", porque sabemos lo importante que era Ethan Kath en la producción de la música; la energía y personalidad de Glass ayudaba a ese 100%, pero no podemos imaginar cómo será ahora, eso ya nunca será Crystal Castles.
Extrañaremos sus caóticos shows, su pegajoso synthwave punk, su decadencia; y siempre serán una leyenda de la escena indie. Te dejamos con "Crimewave", su primer sencillo con el que se ganaron a todos por su melancolía vibrante:
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